El último concierto del Rey
CHIHUAHUA | 26 DE JUNIO DEL 2017 | POR: PATY M. FUENTES | EDICIÓN: JACQUELINE PONCE |
Los asistentes al concierto de Elvis Presley el pasado 26 de junio de 1977, en el Market Square Arena de Indianapolis, nunca imaginaron que estarían en presencia de un hecho histórico, ya que esa fecha es recordada por ser el último recital de “El Rey de Rock n’ Roll” antes de su muerte.
Recordado como un icono cultural en los Estados Unidos, Elvis Aaron Presley falleció en su mansión de Graceland a consecuencia de un infarto al miocardio; sin embargo, como cada vez que una estrella de este calibre muere, hay cierto grado de misterio en torno a las circunstancias que provocaron su muerte.
Elvis, con una carrera de más de 700 grabaciones entre álbumes, sencillos, bandas sonoras y grabaciones en vivo, conoció la fama muy joven cuando la RCA Records publicó su primer disco en 1956.
Barítono y de una habilidad muy especial para bailar, Elvis abarco diferentes géneros tales como el Rock & Roll, Rock, Rockabilly, Country, Blues, Góspel (su principal influencia por su pasado religioso), Rhythm and Blues, Soul y el Pop.
A pesar de ser el principal exponente de su tiempo, situaciones relacionadas con su vida personal afectaron la personalidad del “Rey”, como el divorcio de la que fue la mujer de su vida, Priscila Presley y la muerte de su madre. Fueron eventos de los cuales nunca se recuperó.
Tras lucha contra sus demonios internos, el cuerpo de Presley comenzó a resentir los golpes que la vida le daba. Ese daño que se magnificaba por la gran cantidad de medicamentos que ingería.
Glaucoma, hipertensión arterial, daños en el hígado y megacolon, fueron algunas de esas manifestaciones, que se magnificaban con su significante subida de peso, su mente estaba nublada por paranoias parecidas a las sufridas por el excéntrico magnate Howard Huges, según quienes conocieron al rey en sus momentos de debilidad.
A finales de la década de los setenta, nuevos reyes estaban emergiendo en la escena musical, y el icono estaba a punto de romperse. Aun así, Elvis trataba de levantarse a sí mismo para renacer musicalmente.
A punto de iniciar su más reciente gira de conciertos, Aaron estaba ahí en el Market Square Arena, donde interpretó los éxitos que lo habían colocado en su trono: Jailhouse Rock, Blue Suede Shoes, All Shook Up, My Way y Always in my mind. Sin embargo, la magia parecía que había desaparecido.
Por momentos la buena música se hizo presente cuando Presley se sentó a tocar el piano e interpretó Unchained Melody. El rey se negaba al fracaso.
Quienes asistieron al recital recuerdan que el cantante lucía pálido, hinchado y nublado de la mente tras la publicación de su biografía que dos de sus viejos guardaespaldas estaban por presentar. Quizá era una señal del inevitable final, ese ocurrido el 16 de agosto de 1977, en Graceland cuando el rey se convirtió en un mito.
Esa tarde, Elvis fue encontrado inconsciente en el suelo de su baño y su muerte se hizo pública oficialmente a las 3:30 p. m. Presley falleció en Memphis a la edad de 42 años.